La decisión de dar lactancia materna es la mejor que se puede tomar, ya que le estamos ofreciendo a nuestro bebé un gran comienzo.
La leche materna es la fuente de nutrición óptima para un bebé. Cumple con todos los requerimientos nutricionales para un recién nacido y es más que suficiente durante los primeros seis meses de vida del niño, cuando la alimentación complementaria con alimentos sólidos puede empezar.
Además de sus beneficios nutricionales, la leche materna contiene propiedades especiales que protegen al bebé de algunas enfermedades. Asimismo, este proceso también nos aporta beneficios a las madres, como la prevención de enfermedades como algunos tipos de cáncer, entre otras.
La lactancia materna es un proceso natural y único, que a pesar de tener retos, a largo plazo trae demasiados beneficios. Igualmente, la conexión y el vínculo que nos permite crear entre nosotras y nuestro hijo es incomparable. Por estos motivos te invito a seguir leyendo, para así saber más de la lactancia materna, sus beneficios y mucho más.
¿Qué es la lactancia materna?
La lactancia materna es el proceso por el cual alimentamos a nuestro hijo con leche, desde las primeras horas de vida, a través de nuestros senos. Los senos, segregan leche después del parto y esta debería ser el principal alimento del bebé al menos hasta los dos años.
La lactancia materna es la forma más adecuada y natural de proporcionar aporte nutricional,
inmunológico y emocional al bebé, ya que le aporta todos los nutrientes y anticuerpos que lo mantendrán sano, sin olvidar que le permitirá crear un fuerte lazo afectivo con la madre. La leche materna es la primera comida natural para los lactantes.
¿Cuándo se recomienda empezar la lactancia materna?
La mayoría de las organizaciones a nivel mundial que apoyan y promocionan la lactancia materna, (OPS, OMS, UNICEF) recomiendan iniciar el amamantamiento en los primeros 60 minutos de vida. Comenzar la alimentación del bebé con leche materna en este período es lo que se conoce como “inicio temprano de la lactancia materna”.
Este inicio precoz de la lactancia materna asegura que el recién nacido reciba la primera leche. Esta primera leche es conocida como calostro y es muy importante ya que aporta gran cantidad de factores protectores contra diversas enfermedades, favorece y ayuda a regular el sistema inmunológico del recién nacido y contribuye con la prevención de algunas infecciones.
Asimismo, el comienzo precoz de la lactancia materna favorece un mayor apego entre las madres y su hijo y contribuye a una mayor duración de la misma.
¿Qué es la lactancia materna exclusiva?
La lactancia materna exclusiva (LME) es la alimentación del recién nacido y lactante que consiste en que el bebé solo reciba la leche materna y ningún otro alimento, ni sólido ni líquido, ni siquiera agua, a excepción de las soluciones rehidratantes, vitaminas, minerales o medicamentos en caso de requerirlos.
La lactancia materna debe ser exclusiva hasta los 6 meses de edad y se debe mantener hasta los 2 años o más, en una combinación de la leche materna con los alimentos adecuados y nutritivos para su edad.
¿Qué es la lactancia materna a libre demanda?
La lactancia materna a libre demanda consiste en alimentar con el pecho a nuestro bebé cada vez que dé muestras de tener hambre, sin horarios establecidos, tanto de día como de noche. Igualmente, no hay límite de tiempo en la duración de cada toma, por lo tanto, el horario, la frecuencia y el tiempo que tome la alimentación lo establece las necesidades del bebé cuando da señales de hambre.
Por este motivo, no se puede establecer un intervalo fijo entre una toma y otra, ni una duración preestablecida de cada toma. Cada niño es único y sus necesidades son diferentes. Cada bebé va a ir estableciendo su ritmo de alimentación acorde a sus necesidades. Sin embargo, es importante saber que a medida que el bebé va creciendo, el tiempo entre cada toma se va alargando.
¿Con qué frecuencia son las tomas de leche?
Cada bebé es diferente, por lo que cantidad y la frecuencia con la que se alimenta dependerá de las necesidades individuales de cada bebé. Los niños generalmente toman lo que necesitan en cada alimentación y dejan de comer cuando están llenos. El estómago de un recién nacido es muy pequeño, por lo que no necesita mucha cantidad de leche con cada alimentación para llenarse.
Es importante recordar que la alimentación frecuente ayuda a aumentar la producción de leche materna. Al principio, los recién nacidos necesitan comer aproximadamente cada 2 a 4 horas, esto significa que es posible que se deba despertar al bebé alguna vez para alimentarlo. Se recomienda que los recién nacidos o en los primeros meses no pasen más de 3 horas sin alimentarse, incluyendo la alimentación en la noche.
¿Cómo saber si el bebé está tomando suficiente leche?
Muchas madres primerizas nos hemos preguntado si producimos suficiente leche o si los requerimientos de nuestro bebé han aumentado. Como es difícil medir la cantidad que ingiere el bebé, una buena forma de tener una idea es viendo la actitud del niño. Si nuestro bebé parece feliz y tranquilo después de sus comidas, lo más probable es que esté satisfecho. El llanto y la irritabilidad pueden ser signos de hambre.
Los pañales sucios también son un buen indicador. Algunos padres optan por llevar un registro de tomas de leche y cambios de pañal que se puede mostrar al pediatra. De igual manera, en consulta pediátrica, el bebé será pesado. La ganancia de peso en bebés está estudiada y tu médico sabrá cuánto peso debe ganar semanalmente el bebé.
¿Qué cambios debe implementar en su vida una madre que da lactancia materna?
Los beneficios que ofrece la lactancia materna a los niños son insuperables. La leche materna es el mejor alimento que una madre puede ofrecer a su hijo, tanto por su composición como por el vínculo afectivo que se establece entre una madre y su hijo. Para una lactancia óptima, se recomienda a las madres algunos hábitos saludables durante este período.
- Alimentación saludable: La alimentación es esencial. La madre debe alimentarse de manera saludable, con una dieta variada y equilibrada, con un requerimiento calórico similar al de los últimos meses del embarazo. Se sugiere incorporar a la dieta diaria frutas, verduras y vegetales por su alto contenido de agua, vitaminas, minerales y fibra, carnes magras, aceites vegetales, grasas de alta calidad y lácteos. Se debe evitar el exceso de azúcar añadida. La indicación de suplementos vitamínicos y minerales será según las indicaciones del médico.
- Hidratación: Debe mantenerse una buena hidratación, alternando el consumo de agua, caldos, jugos naturales de frutas, tratando de ingerir en promedio de 2 a 3 litros de líquidos al día.
- Fármacos: Los fármacos y medicamentos prohibidos o permitidos durante la lactancia materna debe ser discutido con el médico.
- Otras sustancias: Hay que tener en cuenta que hay varias sustancias nocivas que se pueden excretar a través de la leche materna, por lo que se tendrá que limitar o evitar su uso durante la lactancia materna. Las principales a mencionar son la cafeína, alcohol, tabaco y otras drogas.
- Mantener el descanso pero sin dejar a un lado la actividad física diaria
- La madre debe hacer lo que le gusta, mantener contacto con los amigos, delegar y compartir funciones, etc.
¿Cuáles son los beneficios de la lactancia materna para el bebé?
La leche materna es el mejor alimento y el más completo que puede recibir nuestro bebé. Le brinda todos los elementos que necesita para un crecimiento y desarrollo saludables. Algunos de los muchos beneficios que aporta la leche materna al bebé son:
- La leche materna tiene las cantidades adecuadas de nutrientes para el óptimo crecimiento y desarrollo del bebé. Además proporciona los minerales y vitaminas que requiere el niño. Tiene la mejor biodisponibilidad de hierro, calcio, magnesio y zinc.
- Es de fácil digestión, lo que disminuye los cólicos del bebé.
- La leche materna protege contra diferentes enfermedades, ya que es rica en inmunoglobulinas que protegen al bebé contra enfermedades respiratorias como neumonía y bronquiolitis, infecciones del oído como otitis media; diarrea, enfermedades de la piel, asma, alergias, etc.
- Los bebés alimentados con leche materna pueden tener menor riesgo de padecer en edad adulta enfermedades como diabetes, obesidad, enfermedades cardiovasculares, cáncer.
- Disminuye el riesgo de desnutrición.
- Disminuye el riesgo de muerte súbita.
- Favorece el desarrollo emocional e intelectual y ayuda a desarrollar un lenguaje claro tempranamente.
- Protege contra caries y reduce el riesgo de ortodoncia en la infancia y la adolescencia.
- La lactancia materna crea un vínculo afectivo madre-hijo, gracias al cual los niños y niñas amamantados crecen más felices, más seguros y más estables emocionalmente.
¿Cuáles son los beneficios de la lactancia materna para la madre?
La madre también se beneficia de la lactancia materna, contribuye a su salud y a su bienestar.
- La lactancia materna libera hormonas beneficiosas como la prolactina, que da sensación de calma y relajación, y la oxitocina, que promueve el apego.
- Las madres que amamantan se recuperan mucho más rápido del parto, ya que gracias a la oxitocina, el útero regresa más pronto a su tamaño y se reduce el sangrado postparto.
- Las mujeres que han amamantado tienen menor riesgo de padecer cáncer de ovario y cáncer de mama posteriormente.
- La lactancia materna exclusiva retrasa el período menstrual, lo que puede ayudar a extender el tiempo entre embarazos.
- Ayuda a quemar calorías adicionales lo que permite recuperar rápidamente el preso previo al embarazo.
- Previene la depresión post-parto.
- Crea un vínculo afectivo madre-bebé
- La lactancia materna es simple, práctica y muy rápida, no requiere preparación ni utensilios, es higiénica y está siempre a la temperatura requerida, por lo que no crea tantos inconvenientes para la madre.
Diferencias entre la leche de vaca y la leche materna
Las diferencias entre la leche de vaca y la leche materna son muy importantes, tanto en cantidad como en calidad. Estas diferencias pueden ser determinantes en la nutrición, en el crecimiento y en el desarrollo del recién nacido y lactante.
Las fórmulas lácteas que se ofrecen para la alimentación del bebé son derivadas de la leche de vaca, la cual ha sido procesada y modificada para tratar de hacerla semejante a la leche materna y así poder ofrecerla como opción a aquellos bebés que por alguna razón no reciben leche materna. A continuación podemos mencionar algunas de las diferencias más importantes que existen entre la leche materna y la leche de vaca:
Proteínas y Aminoácidos
La proteína que predomina en la leche humana es la lacto-albúmina, que tiene un alto valor biológico, mientras que en la leche de vaca predomina la lacto-globulina, que con frecuencia es la que produce alergia.
La leche de vaca no contiene taurina, un aminoácido muy importante en el desarrollo del bebé, mientras que la leche materna es rica en éste aminoácido.
Carbohidratos
En la leche materna, el principal hidrato de carbono es la lactosa, presente en mayor cantidad que en la de vaca. Este azúcar favorece a su vez, la absorción del calcio, hierro, fósforo y otros minerales.
Ácidos Grasos
La leche humana posee gran cantidad de ácidos grasos esenciales, ácidos grasos insaturados que intervienen en el desarrollo del sistema nervioso.
Vitaminas y Minerales
La leche humana tiene todas las vitaminas que el recién nacido y lactante necesita para su crecimiento durante esta etapa, a excepción de la vitamina D y la Vitamina K. La leche de vaca contiene más vitaminas.
El hierro de la leche humana se absorbe en un 50%, y el de vaca en un 10%. El calcio de la leche humana se absorbe mejor que el de la leche de vaca.
Inmunoglobulinas
La leche de vaca contiene muy escasa inmunoglobulina A, mientras que la leche materna es rica en esta inmunoglobulina, que es la que le confiere protección inmunitaria al bebé desde el nacimiento.
Digestión y vaciamiento gástrico
La leche de vaca es de más lenta y difícil digestión. La leche humana es de fácil digestión y el vaciamiento gástrico es muy rápido, se realiza en una a una hora y media.
¿Cuándo está contraindicada la lactancia materna?
Hay muy pocas razones por las que la leche materna no se puede ofrecer al bebé, es decir, está contraindicada. Suelen ser causas muy específicas, casos donde los riesgos son mayores y superan los beneficios de la lactancia materna. Las situaciones que contraindican la lactancia materna son:
- Madres con infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH).
- Madres infectadas con el virus HTLV-1 y 2 (virus linfotrópico de células T humanas).
- Niños con una enfermedad llamada galactosemia.
- Madres con tratamiento con medicamentos para quimioterapia.
¿Se puede tomar medicamentos durante la lactancia materna?
Cuando las madres que están dando lactancia materna tienen que tomar un medicamento, a menudo se preguntan si deben interrumpir la lactancia. La respuesta depende de muchos factores, como por ejemplo, si el medicamento pasa a la leche materna, cuánta cantidad de medicamento pasa, cómo afecta el fármaco al bebé, etc.
Algunos medicamentos no pasan a la leche materna y pueden, por consiguiente, tomarse sin peligro. Hay medicamentos que pasan la leche materna pero en cantidades mínimas. Otros medicamentos, aún en pequeñas cantidades, pueden perjudicar al bebé. Algunos pasan a la leche materna, pero el bebé suele absorber tan poca cantidad que no le afectan. Hay fármacos que no son elección durante la lactancia, otros que deberían evitarse y un grupo que debe utilizarse con precaución durante la lactancia. Es importante no hacer recomendaciones generales y analizar cada caso en particular con el médico.
¿Cuánto tiempo debe durar la lactancia materna?
La OMS y UNICEF recomiendan que los niños inicien la lactancia materna en la primera hora del nacimiento y sean amamantados exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida, lo cual significa que no se les proporcionan otros alimentos ni líquidos, ni siquiera agua
La lactancia materna exclusiva durante 6 meses es la forma de alimentación óptima para los lactantes y a partir de este momento deben empezar a recibir alimentos complementarios sin abandonar la lactancia materna. Se aconseja mantenerla hasta los 2 años o más si así lo desea la mamá y el niño.
¿Cómo continuar la lactancia materna después de regresar al trabajo?
En ocasiones es muy difícil y complicado para algunas de las madres regresar al trabajo, pero eso no significa que deba dejar la lactancia materna. La clave está en prepararse con mucho tiempo de anticipación para cubrir todos los pasos con calma. No se debe esperar el primer día de trabajo para preguntarse cómo hacerlo.
La madre primero debe organizarse para la extracción de la leche, calcular la cantidad de envases y la cantidad de leche por envase que toma el bebé. Familiarizarse con el extractor y tener dónde conservar la leche si tiene que hacer la extracción en el sitio de trabajo. Es importante aprender cómo conservarla en casa, cuánto puede estar fuera y cuánto en la refrigeración.
Al tener el suministro de leche, la madre debe iniciar el uso del biberón para ver cómo lo acepta el bebé, para posteriormente, iniciar la alimentación con la persona que la va a apoyar en el cuidado del niño mientras no esté en casa. Una opción que toman otras madres es iniciar la fórmula cuando no estén en casa y al llegar dar leche materna.
Consejos para una lactancia materna óptima
Cómo hemos comentado anteriormente, desde nuestro punto de vista, la leche materna es el mejor alimento que unos padres pueden ofrecer a su hijo, tanto por su composición nutricional como por el vínculo afectivo que se establece entre nosotras y nuestro hijo. El éxito de la lactancia materna depende de la motivación que tenga la madre y del asesoramiento e información que reciba sobre la lactancia materna, sobre todo en los primeros meses.
- Debe mantener buenos hábitos de alimentación, la cual debe ser saludable y equilibrada.
- Mantener una rutina de ejercicios
- Descansar
- Dar lactancia a libre demanda, sin marcar duración en las tomas.
- Buscar una posición cómoda para la madre y para el bebé.
- Procurar el vaciamiento de ambos pechos
- Evitar el uso de chupete, biberones y evitar ofrecer fórmulas.
- Recordar que la extracción es una opción.
¿Se puede combinar la lactancia materna con la fórmula?
Aunque la alimentación ideal del recién nacido y el lactante es la lactancia materna exclusiva por sus múltiples beneficios, hay determinadas circunstancias en las que puede no ser posible por múltiples razones o bien, se quiere administrar fórmula además de la leche materna, es decir practicar una lactancia mixta.
La lactancia mixta puede ser beneficiosa para algunas madres, ya que le permite adecuarse a diferentes circunstancias entre las que podemos encontrar factores laborales, sociales y familiares.
Cuando se realiza una lactancia mixta es necesario un alto grado de motivación para mantener la lactancia materna, ya que su producción depende de la demanda, por lo que es muy importante hacer un número suficiente de tomas al pecho para que la producción láctea no se vea afectada.
Es ideal que la indicación, la preparación, la frecuencia, la cantidad y el modo en el que se administra la leche de fórmula sea la adecuada para cada circunstancia y cada bebé, intentando preservar la producción de leche materna y el beneficio que supone para el bebé. El inicio y continuación de la lactancia mixta debe ser de la mano de un profesional de la salud con experiencia para que pueda recomendar posibles cambios según las necesidades que haya que cubrir en cada momento.
Resumen final
La lactancia materna es una forma natural de alimentar a nuestros bebés con todo lo necesario durante los primeros meses de su vida. A pesar de que la lactancia materna es una decisión personal e individual, siempre se debe tratar de tomar como primera opción, ya que sus beneficios son muy extensos.
Es un proceso gratificante que puede traer mucha satisfacción, tanto a la madre como al hijo. Dado que puede ser demandante, es importante que la madre cuide de su salud tanto como la de su hijo, por lo que llevar el mejor estilo de vida posible es recomendable.
Esto incluye una dieta balanceada, descansar con frecuencia y mantenerse hidratada. Esto también favorece el suministro de leche y a mantener a la madre llena de energía, preparada para disfrutar del proceso de la lactancia materna junto a su hijo.